por Vito Amalfitano
Hay arqueros “gana partidos”. Y otros que te los salvan. También depende de las circunstancias. Franco Armani fue uno de ellos en un tiempo crucial de la historia de River y le dio todo en un 2018 inolvidable. No le alcanzó para entrar bien en un momento de confusión de la Selección.
Luciano Pocrnjic es un arquero que basó su carrera en la sobriedad. Le respondió a sus equipos siempre que lo necesitaron. Y como capitán de Aldosivi responde a ese rol. Es quien apuntala desde atrás un equipo cuyo mayor capital es el orden.
En la fría noche del cero contra Gimnasia en el Minella se transformó en el arquero “salva partido”. En dos instantes en los que se desestructuró Aldosivi, en el que se rompió su orden, apareció Pocrnjic con dos intervenciones ganadoras, una de ellas impresionante. Una de las mejores atajadas del campeonato.
Primero, a los 25′ del primer tiempo, le tapó todo a Hurtado en un mano a mano de gol. Pero el momento crucial fue a los 38 minutos del segundo tiempo. Tijanovich desbordó hasta el fondo por la izquierda y tiró el centro corto casi en la boca del arco para que defina Comba. El desenlace pareció irremediable para todos los protagonistas y espectadores. Menos para Pocrnjic.
“La virtud es no darse por vencido”, dijo el arquero después en el vestuario para recordar la acción. Y fue así nomás. Sacó la pelota casi desde el fondo del abismo. A Hernán Río, en el relato de LU6, por ejemplo, le quedó el gol en la boca. No llegó a cantarlo por décimas de segundo. Todos vimos gol. Menos Pocrnjic.
“Fue una pelota complicada, la virtud es no darse por vencido ni en una situación así, gracias a Dios pudimos mantener el cero ahí, en un partido tan cerrado”, evaluó el golero.
La sobriedad, la regularidad, su presencia, la garantía de seguridad para sus compañeros, son las características de Luciano Pocrnjic, el arquero de 38 años de Aldosivi que nació en Santa Fe pero que tiene además la nacionalidad croata.
Pero a veces las situaciones se salen de su cauce de normalidad, sobretodo en fútbol. En la última derrota de Aldosivi, ante el líder Racing, Pocrnjic cometió un error a los 3 minutos que condicionó por toda la tarde ese orden natural del equipo de Gustavo Alvarez. Se equivocó al salir jugando y le quedó la pelota a Augusto Solari para el 1 a 0. Un mes después llegó la reivindicación. Y esta vez fue él quien salvó la situación cuando se rompió la estructura defensiva de Aldosivi.
Pocrnjic salvó a Aldosivi, con esa “atajada de oro” ante Comba, y con aquel cierre frente a Hurtado.
Fue de esas noches en las que el orden, el dominio, y la buena elaboración no alcanzan. A Aldosivi le faltó repentización, sorpresa y, aunque el entrenador no lo reconozca, también una referencia en el área. Por eso no pudo traducir en el arco rival la diferencia futbolística que logró demostrar en el campo ante un “ultra conservador” esquema de Gimnasia.
Los jugadores del equipo de La Plata persiguieron sobre las posiciones, ante un equipo eminentemente posicional. Y ni siquiera la entrada de Alan Ruíz, para darle más generación de juego aun, fue suficiente para quebrar ese vallado.
Entonces, cuando nada se puede concretar en el área rival,-tal como sí lo describió bien Alvarez tras el partido- pueden llegar a sufrirse contratiempos en el área propia. Aldosivi, al cabo, fue dueño del trámite pero no de las áreas, efectivamente. Pero, para su suerte, Pocrnjic cerró su arco.
@vitomundial